Protección de equipos.

Protege a los usuarios finales con un antivirus que incluye técnicas de última generación para ofrecer la seguridad en equipos informáticos más completa: tecnología antiransomware, prevención de exploits y mucho más.

EDR (Endpoint Detection and Response).

Para una protección más avanzada, integra en tu antivirus una solución EDR que, haciendo uso de la Inteligencia Artificial y el Machine Learning, detecta y analiza cualquier actividad sospechosa. Una solución EDR recopila información exhaustiva y crea de forma automatizada patrones de detección.

DLP (Data Loss Prevention).

El uso no controlado de dispositivos o el incumplimiento - intencionado o no - de las políticas de seguridad de empresa, da lugar a fugas, pérdida o robo de información. Para las empresas es imprescindible contar con un software DLP capaz de monitorizar tanto la red interna como los dispositivos móviles.

MDM (Mobile Device Management).

Cada vez son más las empresas que cuentan con un software de gestión de dispositivos móviles. Los empleados acceden a la información corporativa desde estos dispositivos frecuentemente, exponiendo a tu organización a riesgos como la pérdida de información crítica o accesos no autorizados. Con una solución MDM valida usuarios y aplicaciones de forma sencilla antes proporcionar el acceso.

MFA (Multifactor Authentication).

La autenticación multifactor (multi factor authentication o MFA) permite agregar una capa de protección durante una transacción para verificar la identidad del usuario. Las contraseñas pueden verse comprometidas fácilmente, pero con un sistema MFA los atacantes se topan con múltiples barreras que dificultan el acceso a su objetivo.

SASE (Secure Access Service Edge).

El Secure Access Service Edge (SASE) aborda los diferentes desafíos de seguridad que se presentan durante el proceso de transformación digital actual. Las empresas deben garantizar a los usuarios un acceso inmediato e ininterrumpido desde cualquier lugar, garantizando también un acceso seguro basado en el modelo de seguridad Zero Trust: permitir el acceso solo una vez llevada a cabo la correcta identificación de usuarios.

Copias de seguridad.

Tener una copia de seguridad de todos los datos es fundamental para poder recuperarlos en caso de pérdida, manipulación o borrado.
Tanto si es un servicio de backup en la nube, en una NAS o una combinación de diversos sistemas, llevamos a cabo la gestión integral de backup y planteamos soluciones a medida para asegurar la integridad de los datos de tu empresa.

Formación al usuario.

Los empleados siguen siendo el eslabón más débil, y los ciberdelincuentes se aprovechan para conseguir el éxito en sus ataques. El phishing es el tipo de ciberdelito más común, y la concienciación de los empleados se vuelve algo imprescindible para poder identificar los puntos débiles y educarlos para facilitar la detección de este tipo de ataques.

Ciberseguridad administrada.

La tecnología y la ciberseguridad siguen avanzando, y los departamentos TI se encuentran cada vez más sobrecargados de tareas, por lo que cada vez es más complicado gestionar nuestros sistemas de manera eficiente. La falta de tiempo y de visibilidad, puede provocar una infraestructura desactualizada y poco protegida. Externaliza los servicios de ciberseguridad en manos de un equipo experto.